Vivienda unifamiliar en Génova, con vistas a la Bahía de Palma.
Fecha de finalización: 2019.

La combinación de tres materiales naturales (piedra, hormigón y madera) requería una iluminación que cediese el protagonismo a estos elementos. La luz utilizada es suave y marca puntualmente las zonas de trabajo y decorativas, que requieren más luz, con luminarias de líneas sencillas y muy discretas, como el concepto que define la arquitectura. El gran reto fue integrarlas en el techo de hormigón, empotrando parcialmente luminarias de superficie.

La planta superior es un enorme voladizo que define, a la vez, la sombra del piso inferior, creando un efecto de ligereza, potenciado por los bordes acampanados de una caja flotante de hormigón horizontal. La iluminación de esta caja se resuelve con un marco de luz que realza su volumen desde el suelo, donde están empotradas las luminarias.

En toda la vivienda, los cristales se ocultan dentro de las paredes. En la planta baja, cuando se abren dan lugar a un gran porche que converge en un solo espacio donde se confunden los límites de interior y exterior. Las persianas de madera dejan pasar la brisa y, a la vez, tamizan la luz del día. Esto crea una casa viva y dinámica que puede cambiar y adaptarse a cada estación y al clima.

Las plataformas ajardinadas se amoldan al terreno, creando distintos niveles y pasos en el jardín. Cada uno de ellos tiene una vegetación mediterránea de temporada que florece en un color diferente en cada una de las estaciones. Las luminarias del jardín están ocultas en la vegetación y destacan sus colores y formas, combinando luces y sombras.

Puedes ver más sobre este proyecto en la revista Home & Dècor 2021 de abcMallorca.